Seres de increíbles capacidades, estas madres del mundo marino te demostrarán las fortalezas y habilidades que tienen para proteger a sus crías; ¡sigue leyendo y sorpréndete!
#1 Mamá pulpo
Ella es uno de nuestros ejemplos favoritos de las mejores madres del mundo marino, la hembra pulpo deposita hasta 100 000 huevos cuando se reproduce, esos pequeños pulpos en gestación son un codiciado alimento para otras especies.
Durante 5 u 8 meses, la mamá pulpo se postra sobre los huevos, protegiéndolos de depredadores y proporcionándoles oxígeno.
En todo el tiempo que cuida de sus huevos la madre pulpo no come, por lo tanto su cuerpo se consume a sí mismo para poder subsistir, cuando los huevos eclosionan ella muere; una especie que da su vida a cambio de que sus crías puedan nacer.
#2 Mamá elefante marino
Una vez preñada la elefante marino empezará a comer mucho más de lo acostumbrado, esto con la finalidad de prepararse para cuando nazca su hijo, una cría que pesará cerca de 30 kilos en promedio.
Los elefantes marinos recién nacidos deben cuadruplicar su peso al terminar su lactancia, esto será posible gracias a que la madre provee a sus crías de una de las leches más ricas en grasa del reino animal, con este alimento rico en nutrientes, los pequeños están listos para empezar una vida independiente.
También te pude interesar: El axolote mexicano, la leyenda de un dios
#3 Abuela orca
Las orcas viven mucho tiempo después de reproducirse, al dejar de ser fértiles no esperan a morir como otras especies, sino que ayudan a toda la familia a sobrevivir, se transforman en líderes fundamentales de sus manadas.
Son muy matriarcas, ellas son las que memorizan el manual de supervivencia de su grupo, saben las rutas y los mejores lugares para alimentarse; la manada suele hacer caso a la abuela orca porque la respetan y confían en su capacidad de liderazgo.
Cuando es temporada de nacimientos las abuelas se encargan de asistir a las otras orcas en sus partos, ayudando a sacar a las crías del cuerpo de la madre.
#4 Mamá y tía delfín
Los delfines mulares son muy buenas madres, ellas suelen elegir una tía para que acompañe y ayude en la crianza de su recién nacido; durante la temporada en la que nacen las crías las delfinas forman alianzas con otras hembras adultas y sus crías, esto con la finalidad de cuidar a los pequeños y de descansar en una especie de red de confianza.
Durante el desarrollo del delfín la madre pasará mucho tiempo dirigiendo los movimientos del bebé al permitir que nade en la corriente de suspensión creada en su estela, ¡hermoso!
La protección de la madre pertenece también a los seres del océano, algo que nos recuerda cómo el amor no es exclusivo de los humanos, sino también de las otras especies que habitan el planeta como las madres de mundo marino; ¡conoce más increíbles datos en Acuario Michin!
No te vayas sin leer: 5 lugares para visitar en Guadalajara que te conectan con la naturaleza.