La naturaleza se llena de melodías a lo largo del día: por la mañana, gracias a las aves y, por la noche, ¡cortesía de las ranas y sapos! Aunque no lo creas, estos anfibios tienen sorprendentes habilidades para “cantar”. ¿Quieres saber más? Sigue leyendo.
¿Por qué cantan las ranas y los sapos?
Las ranas y sapos emiten sonidos con fines reproductivos. Los machos realizan esta labor vocal para que las hembras escojan al indicado.
Regularmente, gran parte de los anfibios cantan cerca de lugares acuáticos como ríos, lagos, pantanos o charcos para dejar a los huevos que, posteriormente, serán renacuajos. Pero también pueden hacerlo desde los árboles, las rocas o el suelo.
¿Sabías que los cantos no solo sirven para conquistar, también para “marcar propiedad”? Un artículo publicado por el CONACYT explica que los cantos son interpretados con el propósito de alejar a su competencia de la hembra con la que se reproducirá.
¿Cómo cantan las ranas y los sapos?
Como ya lo mencionamos, los machos únicamente pueden, ya que anatómicamente están preparados. Son los únicos anfibios que tienen cuerdas vocales con las que pueden interpretar diversos tonos, desde los más agudos hasta los más graves.
Dicho proceso lo hacen de la siguiente manera: cuando expulsan el aire que almacenan en los pulmones, este pasa por la laringe haciendo vibrar las cuerdas vocales que ahí se encuentran.
Pero ¡aquí viene lo más sorprendente! Casi todas las ranas y sapos cuentan con un saco vocal ubicado en la garganta, o bien en cada mejilla. Esta bolsa es muy identificable, ya que se infla antes de emitir cualquier sonido y, al exhalar, hace que la resonancia sea más potente, grave o prolongada.
Eso sí, para llenar sus sacos, deben aguantar la respiración obstruyendo sus fosas nasales.
¿Qué tan fuerte es el canto?
Normalmente las ranas y sapos de mayor tamaño emiten un sonido grave y fuerte debido al volumen de su tórax, sin embargo, este no llega a escucharse tan lejos.
Un reportaje de la DW detalla que la frecuencia de los sonidos altos no superan muchos metros a la redonda, especialmente en hábitats ricos en vegetación como la selva o el bosque. En cambio, las frecuencias de sonidos bajos son capaces de abarcar más distancias.
Es así como las hembras suelen preferir machos con sonidos más duraderos y no tan fuertes, ya que comprueban la resistencia de su pareja, pues croar requiere de enormes esfuerzos. Tan solo imagínate que hay ranas y sapos que pueden croar ¡hasta 11,000 veces por hora!
¿Todas las ranas y sapos cantan igual?
No, cada especie tiene un canto característico para que el macho atraiga a una hembra de su misma clase, además de que le sirve como identificación dentro de los ecosistemas que habita.
El Museo Australiano afirma que, cuando las hembras escuchan el canto de un macho de su especie, son capaces de sincronizar sus orejas para detectar la ubicación del conquistador y diferenciarlo de otros ejemplares.
Es normal que la mayoría de las especies canten por las noches, ya que son más activas vocalmente justo al anochecer. También es común que lo hagan después de llover, ya que la humedad hace que las ranas y los sapos ronden con mayor facilidad.
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En nuestra sede de Guadalajara cuidamos de la rana dardo (Dendrobates spp), un pequeño anfibio que proviene de las selvas del norte de Sudamérica. En vida libre, la especie posee altos niveles de toxicidad peligrosa para el ser humano y esto se debe a los insectos que consume.
A pesar de su tamaño, que va de los tres a siete centímetros de longitud, la rana dardo macho emite un canto bastante prolongado. Da play al video y observa un poco más de ella.
¿Verdad que es impresionante cómo cantan las ranas y sapos? Ahora que lo sabes, comparte esta información y no olvides visitarnos pronto para que puedas escuchar el sonido de la rana dardo.
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